
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) advirtió sobre la llegada de una tormenta solar que impactará principalmente en el sur de la Argentina y podría provocar consecuencias significativas en cualquier momento.
Según los especialistas, esta llamarada solar tiene el potencial de generar fallas temporales en las comunicaciones de alta frecuencia, apagones eléctricos masivos, interferencias en satélites de navegación y comunicación, y pérdidas de conectividad en sistemas de GPS.
En este contexto, es clave que la población se mantenga informada y adopte medidas de precaución para reducir los posibles impactos. La Patagonia y zonas cercanas a la Antártida son las áreas bajo mayor alerta.
¿Qué son las tormentas solares?
Las tormentas solares, o geomagnéticas, son fenómenos generados cuando el Sol emite una gran cantidad de partículas cargadas y radiación electromagnética. Estos flujos interactúan con el campo magnético de la Tierra, alterándolo y produciendo desde auroras boreales hasta fallos en redes eléctricas y sistemas de comunicación.
Estos eventos suelen originarse en eyecciones de masa coronal y explosiones solares en la superficie del Sol. La intensidad de cada tormenta se clasifica en una escala de cinco niveles (G1 a G5) de acuerdo con la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), dependiendo de su impacto potencial.
¿Cuáles son sus consecuencias sobre la Tierra?
Cuando una tormenta solar alcanza la atmósfera terrestre, puede desencadenar efectos variados:
Interrupciones en la navegación aérea y en los sistemas GPS.
Fallos en las comunicaciones de radio de alta frecuencia.
Aumento de la resistencia atmosférica que afecta a satélites de órbita baja.
Riesgos de apagones eléctricos debido a sobrecargas en la red.
Auroras boreales visibles en latitudes más bajas de lo habitual.
En casos severos (G4 o G5), estos efectos pueden derivar en daños a transformadores, pérdidas de servicio eléctrico durante días y graves interrupciones de comunicaciones.
¿Cómo prepararse para la próxima tormenta solar?
Ante la posibilidad de interrupciones en servicios esenciales, se recomienda adoptar algunas medidas de preparación básica:
Informarse: seguir los reportes del SMN y agencias internacionales como la NOAA para conocer la evolución del fenómeno.
Plan de emergencia: contar con un plan familiar y baterías externas para mantener cargados los dispositivos.
Comunicaciones alternativas: tener radios de onda corta o banda ciudadana como respaldo.
Suministros: guardar agua potable, alimentos no perecederos y medicamentos para al menos dos semanas.
Energía de respaldo: mantener un generador portátil en buen estado y suficiente combustible.
Proteger dispositivos electrónicos: usar protectores contra sobretensiones y almacenar radios o linternas en bolsas de protección electromagnética.
Vehículo listo: revisar el auto y mantener el tanque de combustible lleno.
Dinero en efectivo: tener efectivo disponible ante posibles fallos en los sistemas de pago electrónicos.
Red de apoyo: organizarse con vecinos para compartir recursos y planes de contingencia.
Capacitarse en habilidades de supervivencia: aprender primeros auxilios, cómo hacer fuego, cómo purificar agua y cómo cultivar y conservar alimentos.